sábado, 27 de junio de 2015

libertad de verdad, o ¿sólo en lo que interesa?

Esta semana he conocido la campaña de "no somos vasijas" que pretende erradicar la práctica del vientre de alquiler y que denuncia la "cosificación" del cuerpo de las mujeres.

Dejando fuera del debate el tema de que haya países del tercer mundo en que haya "granjas" de mujeres para que gesten los hijos del primer mundo, porque es rechazable sin paliativos; no deja de sorprenderme que las mismas personas que defienden la libertad de la mujer para abortar, por ser dueña de su cuerpo, le nieguen esa libertad para decidir gestar al hijo de otras personas.

Me parece complicado defender un argumento y su contrario.

Se dice que quieren luchar contra el "lobby gay" que aboga por la normalización de los vientres de alquiler. Entonces, queremos igualdad entre gays, lesbianas y heterosexuales, ¿pero solo en algunos aspectos?

¡Ay, coherencia! Por qué desapareces cuando más te necesitamos.