martes, 30 de diciembre de 2008

achmed, el terrorista

Cómo estamos casi a fin de año, pues pondremos un poco de humor al asunto (porque si no mal andamos). Un video que siempre que lo veo me hace mucha gracia, aquí lo dejo por si aún hay alguien que no lo conoce.

viernes, 26 de diciembre de 2008

viva la copia

La música es cada vez menos original. Es muy complicado dar con un ritmo o un sonido que resulte genuino y no nos suena a nada. Sin embargo, yo que no entiendo nada de música (en lo que a creación de la misma se refiere), pues supongo que está limitado lo que se puede hacer y ya son muchos años de generar sonidos para dar con algo nuevo.

Pero esa comprensión se me termina cuando las noticias salpican a grandes artistas, que plagian sin más. Y ahora mismo, lo que está en boca de todo es el de Coldplay. Aquí dejo la muestra:



No se si hay plagio o si no lo hay... supongo que se decidirá en los tribunales... pero si es verdad que resulta demasiado parecido. No sé, veo lógico que la gente se inspire en sonidos que le gusten, que le digan algo, pero ¿hace falta ser tan 'literal'?

jueves, 25 de diciembre de 2008

¿libertad de información?

Me gusta mucho escuchar la radio; mucho más que ver la televisión, cosa que apenas hago. Y es que la radio te permite hacer a la vez otras muchas cosas, además, pese a que estén muy denostadas, soy una gran fan de las 'tertulias radiofónicas' sobre todo las políticas.

Lo malo de los medios, es que escuches lo que escuhes, tiene muy definida la tendencia política con la que va, y hace muy difícil que uno sea capaz de sacar sus propias conclusiones, ya que te lo dan todo más que masticado y esperan simplemente que te lo tragues sin rechistar.

Por eso, en mi opinión es interesante el 'debate' que cada tarde durante media hora más o menos, tienen Julia Otero y Carlos Alsina a las 4 de la tarde sobre el tema del día en Onda Cero. Es especialmente interesante teniendo en cuenta que ambos tienen opiniones tan dispares en ciertos temas.

Sin embargo, el pasado martes, con la resolución del CGPJ sobre el Juez Tirado, asistimos a un momento, en mi opinión un poco lamentable.

Aquí dejo el audio (el debate dura unos 20 minutillos)
http://www.ondacero.es/OndaCero/play/4103595

Sin entrar en quién podría tener más razón o menos, creo que las formas de la señora Julia Otero dejan bastante que desear, porque se puede estar más o menos de acuerdo con Alsina, pero es capaz de defender su postura de manera coherente; pero Otero, entra en ciertos ataques personales y éticos, que son cuánto menos cuestionables.

La señora Otero está en territorio enemigo, y es que su postura política no se acerca demasiado a la de su cadena, cuyo estandarte es Carlos Herrera. De hecho, el EGM ya le está poniendo las cosas difíciles, y la COPE le quita oyentes en su franja horaria. Y estos comportamientos no le ayudan en absoluto.

lunes, 22 de diciembre de 2008

qué haya salud...

Para mí la Navidad, en cierta manera, empieza y termina tal día como hoy.

Me encanta el Sorteo de la Lotería de Navidad. Me gusta tener de fondo la musiquilla de los niños de San Ildefonso, sobresaltarme cada vez que cambian de 'soniquete' porque ha habido premio y esperar a que digan dónde ha tocado.

No es que espere salir de pobre un 22 de diciembre; pero la Navidad es ilusión, y para mí, esa ilusión la tengo los días como hoy en que me pregunto si podré sentir lo que es que te haya tocado la lotería, aunque solo sea un pellizquito para tapar los 'típicos' agujeros.

Pero hoy no será ése 22 de diciembre. Hoy, como para la mayoría de los españoles, es el día de la salud.

Así que, como mi situación económica no ha mejorado, me apuntaré a la idea que un amigo me mandó por email para el menú de estas navidades: marisco .... camuflado.




domingo, 21 de diciembre de 2008

un púlpito en la inmensidad

Una de mis grandes pasiones es viajar. Pero la falta de tiempo, y sobre todo, la falta de dinero hace que disfrute de esa pasión menos de lo que me gustaría.

Son muchos los sitios que tengo intención de llegar a ver algún día, y de vez en cuando iré posteando sobre alguno de esos sitios que tengo en mi lista de 'futuribles' y sobre algunos de los lugares en los que ya he estado.

Y uno esos sitios que tengo intención de ver algún día, es lo que se conoce como "El Púlpito" en Preikestolen.

Los países nórdicos siempre me han atraído mucho: los fiordos, Laponia, el fenómeno de la Aurora Boreal... hay muchas razones para visitar Escandinavia. Pero por ahora solo he podido ir a Finlandia (de ésto hablaré otro día), pero hoy nos pararemos en un rinconcito de Noruega.


'El Púlpito' se trata de una roca, en concreto, un saliente que se asoma sobre el fiordo de Lyse (el fiordo de la Luz), con una caída vertical de 604 metros. La meseta superior mide unos 25 x 25 metros. Visto desde abajo, como se ve en la foto, parece la quilla de un barco que se asoma de entre la roca.

Para llegar hasta allí, la 'excursión' no parece demasiado complicado: "la excursión hasta este púlpito de piedra, enclavado a 600 metros de altura, exige al menos dos horas de subida y una hora y media de bajada en medio de un paisaje que reúne prados, lagunas glaciares y casitas con techos de corteza de abedul. El camino tiene un nivel de dificultad media"

Pero me da la sensación, que tanto si uno está acostumbrado o no a caminar o a hacer senderismo, merece la pena el esfuerzo, y es que las vistas desde allí son increíbles.

No puedo imaginarme la sensación de estar allí, sintiéndose tan pequeñito ante la magnitud de la naturaleza.

viernes, 19 de diciembre de 2008

compartir es vivir

No puedo más que hacerme eco de la campaña en contra de las intenciones de la SGAE sobre limitar el compartir archivos.

SI COMPARTES ERES LEGAL

miércoles, 17 de diciembre de 2008

el que espera ... ¿desespera?

Acabo de leer la siguiente anécdota en el libro en el que estoy metida "Conversaciones con Al Pacino".

Einstein había quedado con un amigo; el susodicho llegó tarde a su cita con él y se disculpó por haberle hecho esperar.
- "Debe haberse aburrido" - le dijo.

A lo que Einstein respondió: "No me he aburrido, he estado pensando"
.

Esto no pretende ser una justificación para los que llegan tarde (porque la impuntualidad es algo que sueler ser molesto); pero si es cierto que cuando tenemos esos momentos en que estamos solos, pero solos de verdad, sin nada que hacer, sin nadie alrededor y sin nada que nos entretenga, hay quienes se sienten incómodos.

En mi opinión, uno de los grandes males de este mundo en que vivimos es que la gente necesita estar 'ocupada'. No sabe estar sola.

Y es que hay muchos que se sienten extraños con ese gran desconocido que son ellos mismos.

martes, 16 de diciembre de 2008

romanticismo por doquier

Hoy me ha llamado la atención una noticia. Resumiendo, dice algo así como que la gente a la que le gustan las comedias románticas tiene más problemas de pareja, porque tiene una imagen 'idealizada' de lo que tiene que ser el enamoramiento y las relaciones.

No me considero muy fan de este subgénero. De hecho algunas de mis películas favoritas (incluso las románticas) tienen final trágico. Pero en cuanto a la noticia, me parece un poco triste que la gente se traiga al mundo real las historias que ve en la pantalla grande.

Y es que, pensemos un poco; cuándo vamos a ver una comedia (del súbgenero que sea) ¿tenemos duda de si acabará bien o mal? A mí me parece que no hay dudas, una comedia, romántica o de la temática que sea tiene que acabar bien; no digo que no haya alguna que no sea así, pero yo no recuerdo ninguna. De hecho, es lógico, si vas a ver una película para pasar un buen rato ¿qué sentido tiene que el final sea trágico?

Pero pese a esto, obviamente todos hemos visto una película y pensado: "¡Cómo me gustaría ser protagonista de esa historia!". Pero llegan los créditos, salimos de la sala y volvemos a nuestra vida. ¿Hay quién de verdad espera cruzarse con el famoso de turno y tener una historia de amor al más puro estilo de Notting Hill? ¿y alguien de verdad espera mirando por la ventana a que alguien venga a salvarla en una limusina como Pretty Woman?

Todos querríamos vivir historias de película, con finales felices, dónde todo el mundo se quiere y todo acaba bien. Pero no es así. Así que más vale que la gente empiece a darse cuenta.

lunes, 15 de diciembre de 2008

aislados del mundo

Cómo no se cansan de decir en las noticias, España está sumida en un temporal de campeonato, que está superando todas las expectativas, y sobre todo, que no es nada propio de estos meses; siendo más habitual en Enero o Febrero. Pero el caso es que ha sucedido. Aquí y aquí información para los que no sepan de qué hablo.

El caso es que la línea principal de comunicación por carretera de Asturias con la Meseta (más directamente con León) es la Autopista del Huerna, de peaje, que si no me equivoco cuesta unos 9 euros. El caso es que ayer al principio de la tarde se cerró esta autopista y se recomendaba el que la gente se fuera por Pajares (red secundaria y de doble dirección).

No es cuestión de detallar las obligaciones de las concesionarias de la administración pública, pero parece más que claro, que una de ellas sería el dar el servicio por el que recibe un dinero y que le hace beneficiaria de esa concesión. Pues no, en España las cosas no funcionan así.

¿Resultado? Que cientos de coches quedaron atrapados en la autopista desde la tarde de ayer hasta bien entrada la madrugada que llegó el ejército.

Hasta aquí, todo podría ser más o menos entendible, no debemos olvidar que siempre se podría alegar fuerza mayor y demás. Pero lo realmente lamentable es que a esta pobre gente que tuvo que cruzar el peaje en fila y detrás del ejército se le cobró su cuota de peaje.

Acojonante.

domingo, 14 de diciembre de 2008

¿en qué mundo vivimos?

Para que después digan que viendo la televisión no se aprenden cosas. Esto es lo que he aprendido hoy viendo “El ala oeste de la Casablanca”.

Resulta que el mundo no es como creíamos. Y no estoy hablando en un modo metafórico ni nada parecido, si no que no es tal y como pensamos que es, físicamente hablando. Me explico.

Por lo visto, el mapa que siempre se ha usado es la proyección Mercator.



“La proyección se basa en el modelo ideal que trata a la tierra como un globo hinchable que se introduce en un cilindro y que empieza a inflarse ocupando el volumen del cilindro e imprimiendo el mapa en su interior. Este cilindro cortado longitudinalmente y ya desplegado sería el mapa con proyección de Mercator. Esta proyección presenta una buena exactitud en su zona central, pero las zonas superior e inferior correspondientes a norte y sur presentan grandes deformaciones. Los mapas con esta proyección se utilizaron en la época colonial con gran éxito. Su éxito se debe a la potencia de Europa de la época. Al ser Europa la potencia dominante que viajaba hacia el nuevo mundo por la zona central, no se comprobó la deformación que sufrían estos mapas. Posteriormente en la época de las exploraciones de Scott por el polo se comprobó que en dichas latitudes el mapa era casi inútil.”

Y resulta que el mapa que refleja las verdaderas dimensiones de las naciones es el Mapa de Peters.



Algunas de las diferencias:

"La proyección de Mercator va exagerando el tamaño y distorsionando las formas a medida que nos alejamos de la línea del ecuador. Por ejemplo:

• Groenlandia aparece aproximadamente del tamaño de África, cuando en realidad el área de África es aproximadamente 14 veces el de Groenlandia.
• Alaska aparece similar en tamaño a Brasil, cuando el área de Brasil es casi 5 veces el de Alaska."


Si se han acabado las épocas de las colonias, los imperios y demás ¿por qué seguimos usando un mapa erróneo? Lo sé, la respuesta es sencilla, pero a veces creo que merece la pena preguntarse lo más obvio.

viernes, 12 de diciembre de 2008

momento 'moñas'

Todos tenemos derecho a un momento 'ñoño' y supongo que hoy me ha tocado a mí...



Espero que no me dure mucho tiempo, porque si no las fiestas pueden ser de lo más deprimentes...

la vuelta a 'un trozo de españa'

Esta mañana me he levantado con la noticia de que la Vuelta España 2009 no pasará por el País Vasco.

Hasta ahí todo normal (sí, solo un párrafo), y es normal porque si no me equivoco, hace mucho que la Vuelta no pasa por Galicia, así que lo logico sería que la cuestión se hubiera quedado ahí.

Pero no, porque lo que convierte este hecho en noticia es la explicación que han dado los partidos vascos para negarse a que haya etapa en Euskadi. Y es que, según dicen, no puede pasar por allí la Vuelta porque el País Vasco no es España.

Personalmente les agradezco la aclaración ... aunque espera, entonces, ¿el País Vasco es Francia? porque el Tour de Francia si ha salido de San Sebastián. E Inglaterra también es Francia, porque si no recuerdo mal hubo un inicio de Tour en Londres. Así que todo es Francia. Pero el Giro de Italia, también ha pasado por Francia, así que en realidad ¡¡¡todo es Italia!!! Ahora entiendo por qué están en el G-8 y no nosotros.

En fin, es un pena que se politice todo lo que toque o huela a vasco... porque entonces se puede caer en preguntarse por qué el equipo Euskatel corre la Vuelta. Y está claro que el que estemos a menos de un año de elecciones autonómicas vascas no ayuda a reducir el número de mamarrachadas que se dicen.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

ya lo decía reverte...

Y es que parece que Arturo Pérez Reverte veía lo que se avecinaba en 1998 cuando escribió este artículo en el Semanal. O puede que simplemente, hace 10 años estuviera pasando lo mismo que sucede hoy en día.

El caso, es que me ha llegado este artículo y me ha parecido de los más rotundos que he leído, así que aquí lo dejo.

`Los amos del mundo´

Usted no lo sabe, pero depende de ellos. Usted no los conoce ni se los cruzará en su vida, pero esos hijos de la gran puta tienen en las manos, en la agenda electrónica, en la tecla intro del ordenador, su futuro y el de sus hijos. Usted no sabe qué cara tienen, pero son ellos quienes lo van a mandar al paro en nombre de un tres punto siete, o un índice de probabilidad del cero coma cero cuatro. Usted no tiene nada que ver con esos fulanos porque es empleado de una ferretería o cajera de Pryca, y ellos estudiaron en Harvard e hicieron un máster en Tokio, o al revés, van por las mañanas a la Bolsa de Madrid o a la de Wall Street, y dicen en inglés cosas como long-term capital management, y hablan de fondos de alto riesgo, de acuerdos multilaterales de inversión y de neoliberalismo económico salvaje, como quien comenta el partido del domingo. Usted no los conoce ni en pintura, pero esos conductores suicidas que circulan a doscientos por hora en un furgón cargado de dinero van a atropellarlo el día menos pensado, y ni siquiera le quedará el consuelo de ir en la silla de ruedas con una recortada a volarles los huevos, porque no tienen rostro público, pese a ser reputados analistas, tiburones de las finanzas, prestigiosos expertos en el dinero de otros. Tan expertos que siempre terminan por hacerlo suyo. Porque siempre ganan ellos, cuando ganan; y nunca pierden ellos, cuando pierden.

No crean riqueza, sino que especulan. Lanzan al mundo combinaciones fastuosas de economía financiera que nada tienen que ver con la economía productiva. Alzan castillos de naipes y los garantizan con espejismos y con humo, y los poderosos de la Tierra pierden el culo por darles coba y subirse al carro. Esto no puede fallar, dicen. Aquí nadie va a perder. El riesgo es mínimo. Los avalan premios Nóbel de Economía, periodistas financieros de prestigio, grupos internacionales con siglas de reconocida solvencia. Y entonces el presidente del banco transeuropeo tal, y el presidente de la unión de bancos helvéticos, y el capitoste del banco latinoamericano, y el consorcio euroasiático, y la madre que los parió a todos, se embarcan con alegría en la aventura, y meten viruta por un tubo, y luego se sientan a esperar ese pelotazo que los va a forrar aún más a todos ellos y a sus representados. Y en cuanto sale bien la primera operación ya están arriesgando más en la segunda, que el chollo es el chollo, e intereses de un tropecientos por ciento no se encuentran todos los días. Y aunque ese espejismo especulador nada tiene que ver con la economía real, con la vida de cada día de la gente en la calle, todo es euforia, y palmaditas en la espalda, y hasta entidades bancarias oficiales comprometen sus reservas de divisas. Y esto, señores, es Jauja.

Y de pronto resulta que no. De pronto resulta que el invento tenía sus fallos, y que lo de alto riesgo no era una frase sino exactamente eso: alto riesgo de verdad. Y entonces todo el tinglado se va a tomar por saco. Y esos fondos especiales, peligrosos, que cada vez tienen más peso en la economía mundial, muestran su lado negro. Y entonces, oh prodigio, mientras que los beneficios eran para los tiburones que controlaban el cotarro y para los que especulaban con dinero de otros, resulta que las pérdidas, no. Las pérdidas, el mordisco financiero, el pago de los errores de esos pijolandios que juegan con la economía internacional como si jugaran al Monopoly, recae directamente sobre las espaldas de todos nosotros. Entonces resulta que mientras el beneficio era privado, los errores son colectivos, y las pérdidas hay que socializarlas, acudiendo con medidas de emergencia, con fondos de salvación para evitar efectos dominó y chichis de la Bernarda. Y esa solidaridad, imprescindible para salvar la estabilidad mundial, la paga con su pellejo, con sus ahorros y a veces con su puesto de trabajo Mariano Pérez Sánchez, de profesión empleado de comercio, y los millones de infelices Marianos que a lo largo y ancho del mundo se levantan cada día a las seis de la mañana para ganarse la vida.

Eso es lo que viene, me temo. Nadie perdonará un duro de la deuda externa de países pobres, pero nunca faltarán fondos para tapar agujeros de especuladores y canallas que juegan a la ruleta rusa en cabeza ajena. Así que podemos ir amarrándonos los machos. Ése es el panorama que los amos de la economía mundial nos deparan, con el cuento de tanto neoliberalismo económico y tanta mierda, de tanta especulación y de tanta poca vergüenza.

Arturo Pérez-Reverte

martes, 9 de diciembre de 2008

damos el Congreso por visto

Cómo decía un famoso presentador de la televisión "¡¡prueba superada!!".

Y es que después de dos horas y media de cola, y de varias amenazas de lluvia, cumplí ese deseo que tenía desde que era una renacuaja, que fue entrar en el Congreso de los Diputados.

Aunque tal y como ví en las noticias esa misma noche, a los que fuimos en el 'turno de tarde', no nos recibió Bono... una pena, hubiera sido divertido.

A la entrada, después del chocolate, café o caldo, a elección del consumidor, podían recogerse una especie de postales que rezaban: "Gracias por dejar tu escaño en casa y venir a los nuestros". Y es que, a los que en el fondo somos unos idealistas y unos utópicos, el estar sentado en los escaños de sus señorías, nos infunda cierto respeto.

Sentada en el sillón que está detrás de ZP (a la bancada azul estaba prohibido el paso), me puse a pensar en todas esas escenas más bien bochornosas que a lo largo de los últimos años hemos visto por la televisión y que a más de un diputado debió hacer sonrojar; la única conclusión a la que llegué, es que tal y como nos pasaba cuando empezábamos al cole o al instituto, una vez pasada la primera semana en que todo nos impresionaba y que hacía que nos comportáramos con un respeto minucioso, empezábamos a no dar importancia lo que nos había costado llegar hasta allí.

De la misma manera, imagino que los políticos, al menos la gran mayoría, se ha acomodado, y ni el escudo, ni el atril, ni siquiera los balazos de Tejero hacen que les entre conciencia de donde están realmente.


Al finalizar la visita, tras ver la interesante exposición de fotografías de la democracia (dónde pude oir de todo, en parte porque azuzaba a los que veía más proclives), nos dieron una mochila, que contenía una Constitución y un lápiz USB de 1Gb. Así que desde aquí, gracias a todos los contribuyentes por el regalo. Prometo hacer buen uso de todo.

jueves, 4 de diciembre de 2008

camino a la capital

Bueno, pese a que este blog lleva pocos días abiertos, durante unos días (lo que dura este fin de semana largo) estará más muerto de lo habitual.

Y es que me voy a Madrid, la capital del Reino. ¿Para qué? pues para salir de la rutina ... aunque sobre todo porque como casi todo el mundo, conozco gente viviendo en Madrid, lo que me asegura alojamiento de gratis.

Y quién sabe, siendo las fechas que son, igual consigo cumplir un sueño de infancia: entrar en el congreso.

historias de un chandal

Situémonos. La calle más céntrica de mi ciudad. Un lugar donde la gente suele ir, en general, bien vestida, pero como en casi todos los lados, hay de todo.

De hecho, hoy tenía que pasar el día en la biblioteca del centro, y yo, fiel a 'mi estilo' (si es que tengo de eso), me fui a la biblioteca en pantalón de chándal, playeros y sudadera.

El hecho es que de la que salía pasé por una confitería muy típica, y puesto que hay gente golosa en casa, pensé en comprar un capricho. Pero de la que entré, mis 'pintas' hicieron que las dependientas me miraran de arriba a abajo.

Pero eso no fue todo, cuando comenté lo que quería, esperaba que me asesoraran un poco, porque no soy muy de dulces, así que no tengo costumbre; pero por 'alguna razón' creía que lo mejor para mí era lo más barato y la caja más pequeña.

Tras elegir lo que me pareció conveniente, mientras me preparaban la susodicha caja, una dependienta no me quitaba ojo, ¿qué pensaba que iba a robar una milhoja o un croissant?

A la hora de pagar, tenía cambio de sobra, pero le dí un billete de 50€ ¿por qué? pues no lo sé, supongo que fue un mero acto de estupidez tratando de 'darles una lección'. Pero ahora mismo, pienso que fue un poco patético.



No sé, quisiera pensar que todo fue fruto de mi imaginación, pero me cuesta verlo así. ¿La gente aún piensa que por ir en playeros y sudadera eres un pobre diablo? La verdad es que me da un poco de pena, porque lo que está claro es que yo seguiré llevando chandal y sudadera cuando me apetezca; y también está claro que no pienso volver a entrar en esa pastelería.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

la vida sigue

Ayer, de nuevo, ETA volvió a poner fin a una vida; en este caso un empresario vasco. ¿Su delito? Ser adjudicatario de parte de las obras del AVE, contra las que ETA parece tener bastantes problemas, imagino que por estar financiado con dinero español.


Este hombre, se dirigía, como todos los días desde hacía años, a un bar cercano para jugar la partida de cartas de la tarde. Pese a la sorpresa inicial de los que le conocían: "¿cómo pueden haberle hecho esto? si era de aquí de toda la vida" (cómo si los que no lo fueran sí se lo merecieran). Pero como decía, tal la sorpresa inicial, dos horas más tarde, el bar a donde se dirigía presentaba la misma estampa de todos los días:


El asesinado había sido sustituido en la mesa de la partida y la vida continuaba.

No dudo que por dentro, éstos y todos los vascos estuvieran lamentando lo que había pasado. Pero el hecho de que lo asuman y sigan como si nada, da mucho que pensar.

Por mucho que la policía o los políticos hagan, mientras la sociedad no cambie y se de cuenta de que no pueden hacer como si nada cada vez que alguien es asesinado, esta pesadilla no terminará.

por si no fuera suficiente...

Por si no tuviéramos bastante con la oleada de 'buenísimas' noticias que los medios nos regalan últimamente, ahora llegan unos estudiosos de USA para decirnos que en los próximos 5 años es probable que haya un ataque nuclear o con armas biólogicas en algún lugar del mundo.

Pues vaya, me quedo mucho más tranquila; ahora ya me importa menos el paro, las hipotecas, o si tendré o no dinero suficiente para comprar los regalos de Navidad. Lo malo será cuando este supuesto acto terrorista tenga lugar, y no me toque a mí. En ese momento tendré que volver a pensar en el paro, en la hipoteca y en todas esas cosas que no puedo comprar porque no tengo dinero.

Pero un momento ... ¿le beneficiará todo esto a alguien? Y es que el miedo, es un arma tan poderosa, incluso mucho más que todas esas armas que parece que nos amenazan, porque no olvidemos que todas esas armas se usan por miedo.

Quién tiene el poder del miedo, tiene el poder absoluto.

martes, 2 de diciembre de 2008

a vueltas con el pasado

Y yo me pregunto, ¿qué hemos hecho para merecer tal indignidad de políticos? Y en este caso no hago distinción entre siglas y colores, porque por demagogo que suene, son todos iguales.

Y no me refiero al estúpido debate de si 'Espe' debió quedarse o no en la India más tiempo ... aunque tiene cola la cosa; ni siquiera a sí el espectáculo de ver a la susodicha en calcetines recién 'huida' de Mumbai era digno del más alto populismo o de la mediocridad más terrible.

Me refiero a esta tendencia de los políticos españoles de preocuparse en lo que paso ayer, en vez de lo que está pasando hoy, o de lo que pasará mañana.

¿Cuántas veces oímos a Aznar sacar el tema de los GAL, Roldán y demás escándalos? Si mi memoria no me falla, fueron muchas. Y en su momento era injusto, porque el nuevo equipo del PSOE no tenía por qué responder de errores de otros. Pero en este país está muy mal visto el aprender de los demás, y ahora, tenemos al PSOE en el gobierno, que ha estado machaconamente 4 años dando la murga con la guerra de Irak, pero cuando parecía que por fin se dejaba el pasado, volvemos a los aviones de la CIA durante el mandato de Aznar.

¿No era suficiente estar revolviendo la mierda con el tema de la Guerra Civil?

¿Llegará un día en que tendremos un Gobierno que se preocupe en lo que pase hoy? Quisiera creer que sí, pero no lo tengo nada claro.

lunes, 1 de diciembre de 2008

'la ola' V y último

5. Poder a través del entendimiento.
Descubriendo la verdad.
El viernes, último día del ejercicio, me pasé toda la mañana preparando el auditorio para la concentración. A las 11:30 los alumnos empezaron a entrar en fila india, llenando las hileras de asientos. El silencio inundaba la sala. Las banderas de la Tercera Ola colgaban como nubes desde el techo. A las doce en punto cerré la sala y puse guardias en las puertas. Varios amigos míos, actuando como reporteros y fotógrafos, empezaron a tomar fotos y a escribir rápidas notas. No había ni un solo asiento libre. El grupo estaba compuesto por distintos tipos de muchachos: los atletas, los socialmente prominentes, los dirigentes, los solitarios, los que siempre se iban temprano de clases, los ciclistas, los bromistas, los dadaístas... La colección completa parecía, sin embargo, una sola fuerza, al sentarse en una perfecta posición de atención. Todos se fijaban en el equipo de televisión, que yo había ubicado al frente de la sala. Nadie se movía, el silencio era profundo, pareciendo que todos eran testigos de un nacimiento. La tensión y la ansiedad eran increíbles.

"Antes de comenzar la Conferencia Nacional de Prensa, que empieza dentro de cinco minutos, quiero demostrar a la prensa el nivel de nuestro entrenamiento". Diciendo esto, hice el saludo y, enseguida, doscientos brazos, automáticamente, me saludaron. Después, dije: "PODER A TRAVÉS DE LA DISCIPLINA". Doscientas voces repitieron en coro: "PODER A TRAVÉS DE LA DISCIPLINA". Lo repetimos una y otra vez y la respuesta cada vez era más sonora. A este punto, los fotógrafos aunque seguían tomando fotos, eran ignorados. Reiteré la importancia de este evento y, una vez más, pedí disciplina. La sala retumbó con el grito gutural de "PODER A TRAVÉS DE LA DISCIPLINA".

Eran las 12:05, Apagué las luces y caminé rápidamente hacia el equipo de televisión. Parecía que el aire de la sala se estaba secando y era difícil respirar y, más difícil aún, hablar. Era como si, en su clímax, la muchedumbre enardecida hubiera echado todo fuera de la sala Encendí el televisor. Ahí estaba yo, parado, junto al aparato, mirando hacia la sala repleta. La pantalla produjo un haz luminoso azul pálido. Roberto estaba a mi lado. Le susurré que mirara atentamente y no se distrajera en los próximos minutos La única luz de la sala provenía del televisor, reflejándose en los rostros de los alumnos. Los ojos se esforzaban, mirando la luz, pero ésta no cambiaba. La concurrencia se mantuvo quieta esperando. Había una guerra mental entre la gente del auditorio y la televisión y fue esta última la que ganó. El fulgor del aparato no mostró ningún candidato presidencial, simplemente se apagó. Los que contemplaban, todavía persistían. ¡Tenía que haber un programa! ¡Tenía que venir! ¿Dónde estaba? El trance frente al televisor continuó durante lo que parecieron horas: eran las 12:05, Nada. Un televisor apagado. No iba a suceder. La ansiedad se transformó en frustración. Alguien se paró y gritó:


La decepción.

"¿No hay ni un líder?. ¡Verdad!". Todos miraron sorprendidos al alumno y luego al televisor. En sus rostros habla una mirada de incredulidad. En la confusión del momento, me moví despacio al televisor, sintiendo la respiración de la gente. Esperaba un bombardeo de preguntas, pero sólo hubo un profundo silencio. Empecé a hablar, cada palabra parecía ser escuchada y absorbida.
"Escuchen claramente, tengo una cosa muy importante que decirles. No hay, ningún líder. No hay nada que se parezca a un movimiento llamado "Tercera Ola". Uds. han sido usados, manipulados, empujados por su propia voluntad hacia el lugar en que se encuentran en este momento. Ustedes no son mejores ni peores que los nazis alemanes que hemos estado estudiando".

"Ustedes pensaron que eran los elegidos, que eran mejores que los que están fuera de la sala. Ustedes vendieron su destino y su libertad por la comodidad de la disciplina y la superioridad. Ustedes eligieron aceptar el deseo del grupo y la gran mentira de su propia convicción y creyeron que sólo lo hacían, por diversión, en un comienzo, que podrían salirse en cualquier momento, pero, ¿hasta dónde habrían llegado? ¿Qué tan lejos podrían haber ido? Déjenme mostrarles su futuro". Con esto, encendí una proyectora de cine. Inmediatamente iluminó una tela blanca que colgaba encima del televisor. El rugido de la concentración de Nüremberg apareció en la pantalla. Mi corazón golpeaba fuertemente. En imágenes fantasmagóricas, la historia del Tercer Reich desfiló ante la sala. La Disciplina. La marcha de la Súper Raza. La gran mentira. Arrogancia, violencia, terror. Gente empujada dentro de grandes camiones. La visión de los campos de concentración, caras sin ojos. Los juicios. La plegaria de la ignorancia.
Yo sólo hacía mi trabajo, Mi trabajo. Abruptamente, como empecé la proyección de la película, terminé con una frase: "Todo el mundo debe aceptar la culpa. Nadie puede declarar que no tomó parte alguna".

La sala permaneció oscura mientras el rollo cambiaba de carrete. Me sentí enfermo del estómago. La sala olía a camarín. Nadie se movía. Era como si cada une quisiera disecar ese momento, descubrir qué había pasado. Era como despertar de un sueño profundo. Toda la gente en la sala miró por última vez hacia su conciencia. Esperé durante varios minutos para que todos recapacitaran. Finalmente, algunas preguntas empezaron a surgir. Todas ellas indicaban una situación imaginaria y buscaban encontrar el significado de este evento.
Todavía en la sala a oscuras, empecé la explicación. Confesé mi sensación de enfermedad y remordimiento. Expliqué a la asamblea que una aclaración completa tomaría tiempo. Me vi desplazándome desde un punto de introspección activa en el evento, hasta el papel de profesor: es más fácil ser profesor.

La explicación final.
"A través del experimento de la semana pasada, todos sentimos qué era vivir y actuar en la Alemania nazi. Aprendimos qué se siente al crear una sociedad disciplinada, al construir una sociedad especial y rendir pleitesía a esa sociedad, instituir la razón a través de reglas. Sí, todos habríamos sido buenos alemanes. Nos habríamos puesto el uniforme, habríamos dado vuelta la cara ante nuestros amigos perseguidos y encarcelados. Nosotros mismos habríamos cerrado los goznes. Habríamos trabajado en los centros de "defensa", quemado ideas.
Sí, sabemos, a escala, qué se siente ser un héroe, tener decisiones rápidas, sentirse fuerte y controlando el destino. Conocemos el miedo de ser dejado fuera, el placer de hacer algo bien y ser recompensado, ser el número uno, estar en lo correcto. Hemos visto, y, a lo mejor, sentido, lo que estas acciones, al ser llevadas a un extremo, pueden causar. Cada uno de nosotros ha sido testigo de algo en la semana recién pasada. Hemos visto que el fascismo no es solamente cosas que esa gente hizo. No. Está aquí, en esta sala, en nuestros propios y personales hábitos y formas de vida. Remuevan la superficie y aparecerá. Es algo que está en todos. Lo llevamos como un virus. La creencia de que los seres humanos son básicamente malos y que, por esto, no pueden actuar bien hacia sus semejantes, es una creencia que requiere de un fuerte líder y de disciplina para preservar el orden social y, aún más, es el acto de la defensa, de la apología".
"Esta es la lección final que debemos experimentar. Esta última lección, es, a lo mejor, la de mayor importancia. Esta lección era la pregunta que inició nuestra inmersión en el estudio de la vida nazi. ¿Se acuerdan, de la pregunta? Concernía a la ignorancia del pueblo alemán, reclamando no saber y no estar involucrado en el movimiento nazi. Si me acuerdo bien de la pregunta, ésta iba así: ¿Cómo pudo el soldado alemán, el conductor de trenes, la enfermera, el recaudador de impuestos, el ciudadano común, clamar, al final del Tercer Reich, que no sabía nada de lo que pasaba? ¿Cómo pudo, la gente, ser parte de algo y luego declarar no estar realmente involucrada? ¿Qué hizo que la gente se olvidara de su propia historia? En los próximos minutos y, quizás, años, Uds. tendrán la oportunidad de responderse estas interrogantes". "Si vuestra actuación sobre la mentalidad fascista ha sido lograda, ni uno de Uds. va a admitir jamás que estuvo presente en esta reunión final de la Tercera Ola. Como los alemanes, tendrán problemas para admitirse a Uds. mismos que llegaron tan lejos. No permitirán a sus amigos ni a sus padres saber que hubieran podido entregar la libertad personal y el poder individual a los dictadores o a un líder invisible. No pueden admitir que fueron manipulados, que fueron seguidores, que aceptaron la Tercera Ola como una nueva forma de vida. Uds. no admitirán que participaron en esta locura. Harán de este día y de esta reunión un secreto y es un secreto que yo compartiré con Uds." Saqué la película de la cámara y expuse el celuloide a la luz. El juicio había terminado. La Tercera Ola había terminado.

Miré hacia atrás. Roberto estaba llorando. Los alumnos se levantaron lentamente y, sin palabras, abandonaron la sala. Caminé hacia Roberto y lo abracé. Estaba sollozando y respiraba ahogadamente. Le dije: "Ya terminó. Está bien". Al consolarnos mutuamente, fuimos una roca en el arroyo de los estudiantes. Algunos se voltearon, estrechándonos, a Roberto y a mí. Otros lloraban abiertamente y se limpiaban las lágrimas, para seguir llorando. Eran seres humanos circulando y abrazándose mutuamente, yendo hacia la puerta, hacia el mundo exterior.
Durante una semana, en la mitad del año escolar, habíamos vivido y compartido intensamente un secreto.

En los cuatro años que fui profesor en el Cubberly High School, nunca nadie admitió haber asistido a la reunión final de la Tercera Ola. Por supuesto que hablamos y analizamos profundamente nuestras acciones, pero la reunión, no: Era algo que todos queríamos olvidar.